Hombres de vida y hombres de muerte

En el camino de la vida encontramos muchos hombres de todo estilo.

Veamos algunos:

-Los buenos amigos. Ellos nunca tuvieron ningún interés romántico, ni sexual con nosotras. Son excelentes porque nos dan su punto de vista masculino, cuando no entendemos actitudes de nuestra pareja o de su género. Son tan buenos amigos, que en épocas de crisis, hasta nos preguntamos por momentos, si no sería que ese nos convendría jajaja.

-Los gays. No quiero caer en estereotipos, pero de verdad que mis amigos gays son los mejores del planeta. Me dan cursos de ubicatex intensivos, así como también gozamos a morir. LOS AMO.

-Los amor platónico. Siempre nos gustaron, creemos que nosotras también a ellos, pero hizo falta ese momento idóneo donde el viento sopla y uno ¡zaz! Con ellos siempre nos queda la incógnita de lo que pudo haber sucedido.

-Los suelta-perros. Uno sabe que no le puede dar la mano porque le agarra la t…

Estos cansan y no se vencen con facilidad. Dependiendo del grado de majadería se les puede ignorar. Si son muy necios y además se pasan ¡SE VAN PAL CARAJO!

-Los acosadores . ¡Ah no! estos son los peores, son esos que andamos denunciando por acosadores. Nos los topamos en todo lado. Esos tipos no respetan nada, no importa si estamos embarazadas o andamos con burka ¡atacan a todas por parejo, desgraciados!

-Los señores bien. Son mayores y nos tratan con respeto. Tienen hijas y se comportan con nosotras como les gustaría que otros lo hicieran con sus hijas.

-Los machistas. Ojalá no los conociéramos, pero claro que los tenemos identificados y muchas veces los tenemos más cerca de lo que quisiéramos.

-Los que nos aman, respetan y protegen. Pueden ser amigos, jefes, pareja, el vecino o el señor de la pulpería. Ellos inspiran confianza.

-Los primos, tíos, hermanos, papá y demás familiares. Ellos también nos funcionan para entender la mentalidad masculina. Se les ve desde siempre y por eso hay confianza para abordarlos con temas de toda índole. Acá podemos encontrar a algunos de nuestros hombres favoritos. También acá podemos topar con los abusadores ¡mucho cuidado!

-Los hijos. Príncipe encantado, amor de mamá, pero hay que entender que en algún momento hay que soltarlos y dejarlos ser. Nada peor que un novio o marido mamitas.

-El amor. Ese que nos mostró que podemos amar con toda el alma y sentirnos afortunadas de haberlo encontrado. 

Hay muchos más tipos de hombres, pero al final los podemos dividir en dos: LOS QUE VALEN LA PENA Y LOS QUE NO. LOS COMPAÑEROS DE VIDA Y LOS COMPAÑEROS DE MUERTE.

Los de vida nos la dan ¡y hasta creamos nuevas vidas junto a ellos! Los de muerte, nos roban la paz, la alegría y en algunos casos hasta la vida.  

Si somos madres, eduquemos hijos que valgan la pena. Como mujeres podemos ayudarlos a forjar una nueva masculinidad. Como esposas, hermanas, hijas, amigas y ciudadanas, exijamos respeto, no seamos tolerantes con el machismo en el que solían vivir muchas de nuestras abuelitas y madres. ¡ESO SE ACABÓ!

Hombres, juntos podemos ser tan felices. Sean fuente de alegría y amor, no de miedo y repudio.