Se busca pediatra

Cómo que se te va el pediatra. ¡Tan bella gente! Y ahora buscar uno nuevo es como hacer casting. Lo más interesante es que justo estaba conversando el lunes con varias amigas de cómo eligieron al suyo y sinceramente, ¡cómo cambió todo! Talvez lo que ellas hacen te sirva, porque este es el tipo de decisiones en las que uno no quiere fallar.

Melissa tiene gemelas, dice que a ella se lo recomendaron y que cuando supo que había trabajado como director de pediatría en un hospital público, se sintió super tranquila. “Solo las llevo a consulta cuando el caso es severo, porque casi siempre le mando mensajes de texto o correo electrónico describiendo los síntomas – de ser necesario les tomo foto –.” Asegura que rápidamente el médico le contesta y le sugiere qué hacer. Impensable cuando éramos chiquillas, pero ahora es genial contar con médicos que usen la tecnología para aligerar las consultas. Pensá cuánto se ha ahorrado Melissa en el pago de citas, además.

Paula tiene una parejita, la de 6 y el de 4, y no se fía de la tecnología.
“El hecho de que ahora que tengamos la compu a la par y podamos buscar desde diagnóstico hasta medicina en Google, no lo hace más sencillo. Sí, busco información en Internet – y al pediatra eso no le hace gracia – pero siempre termina teniendo razón el médico”.

Me llamó la atención que las dos me dijeran que quien les sugirió el pediatra fue su ginecólogo y que por lo general, el mismo pediatra que ve a sus hijos es el que ve a los niños de sus hermanos o hermanas. Yo solo soy tía, pero creo que desconfiaría montones de un médico que no me conteste un correo electrónico, tanto como de uno que solamente me refiera cosas por sms.

Entre los tips que ambas mencionaron estaba algo curioso: para consultas generales y chequeos de rutina, no olvidar que existen los EBAIS donde atienden muy buenos médicos. Y para emergencias o patologías muy particulares, ahí sí recurrir a la consulta privada que sabés que es inmediata. Así que ahora que tu pediatra se fue, ya sabés que hasta por Skype le podés hacer una que otra consulta. Averigüemos en el Ebais que está por tu casa. ¡Todo es preguntar!

Consejos adicionales, según la Asociación Americana de Pediatría:

Asegurate de que esté colegiado. Si nadie te da una recomendación convincente, buscá en el Colegio de Médicos la lista de pediatras en ejercicio.
Buscá especialistas según el perfil del paciente. Por ejemplo, niños asmáticos necesitan atención particular. Un neumólogo colabora montones en estos casos.
Revisá currículos. Universidad, estudios adicionales, puestos en cargos públicos, investigaciones y asociaciones a las que pertenece el médico.
¿Demasiado popular? ¡Qué bien! Pero un médico muy famoso tendrá poco tiempo para consultas amplias. Equilibrá el grado de popularidad con la disposición. No te vayás solo por “el de moda”.
Empatía. La relación paciente-médico en términos de pediatría también cuenta. ¿Para el niño es agradable la visita? Tomalo en cuenta.
Cercanía: muy bueno el médico, pero si lo tiene muy lejos de casa, puede que en emergencias necesite de alguien más cercano.