¡Esos complejos que nos roban la paz!

Tristemente debemos reconocer que la gran mayoría de nosotras tenemos uno que otro complejo por ahí, que nos martiriza la vida. Hay dos opciones: 1) Nos aceptamos tal cuál somos o 2) Disfrazamos un poco aquello que no nos gusta tanto. También existe la opción del bisturí pero ese es otro tema. Acá te pasamos unas recomendaciones sencillas de tomar en cuenta.

CARA REDONDA:

SÍ: las melenas lisas y largas.
Los flequillos largos, ladeados y desfilados.
Los peinados con raya al lado.

NO: cabello corto, flequillos cuadrados sobre la frente.
Carrera al centro.
Las coletas ajustadas.

CARA ALARGADA

SÍ: cabello con volumen a los lados, flequillos anchos y cuadrados en la frente.
Peinados con rizos y ondas. El largo recomendado es a media altura.
Capas que enmarquen tu cara.

NO: cabellos largos y lacios con raya en el medio.

CADERAS ANCHAS:

SÍ: pantalones de piernas anchas y lisos.
Vestidos de corte imperio.
Blusas con escote en V.
Cinturones delgados que marquen la cintura.

NO: los estampados grandes y rayas horizontales.
Los colores claros en enaguas, shorts, vestidos o pantalones.
La ropa muy ajustada o muy amplia.
Los cinturones anchos que fijen la atención en las caderas.

CADERAS ESTRECHAS

SÍ: faldas tipo globo, fruncidas o plisadas.
Cuadros y estampados.
Péplum.
Pantalones con bolsillos marcados.
Colores claros en pantalones, vestidos, enaguas y shorts.

NO: ropa muy ajustada, demasiado recta o con tejidos que se peguen al cuerpo como la licra.

PECHOS GRANDES

SÍ: una blusa o chaqueta por encima de una prenda liviana.
Aretes llamativos que desvíen la atención.
Blusas a la altura de la cadera que alarguen el torso.
Un brassiere adecuado.
Prendas con drapeado en la cintura.

NO: lentejuelas, rayas o brillos que llamen la atención.
Collares grandes.
Ropa ajustada que resalte la parte más grande de tu cuerpo.
Los cuellos de tortuga.
Las blusas con bolsillos o estampados en el área de los senos.
Los tirantes delgados.

PECHOS PEQUEÑOS

SÍ: los escotes redondos y cerrados y los tipos halter, que centran la atención en los hombros descubiertos.
Los colores brillantes y claros.
Los collares grandes a la altura del pecho.
Brassiere push up.
Blusas con bolsillos a la altura del pecho y chaquetas con solapa.
Los bordados, incrustaciones y barbas también te favorecen.
Las espaldas descubiertas.
¡Enderezate! Una buena postura colabora.
Los cuellos de tortuga.

NO: los escotes de cuello en V.
Los brassieres que queden grandes.
Las blusas oscuras y ajustadísimas.

MUY BAJITA

SÍ: tacones con un color similar a tu piel ya que si andás en enagua, crearás una ilusión de piernas largas.
Estampados con rayas verticales o diagonales.
Escotes cuello en V, que alargarán tu cuello.
Pantalones ajustados a la cintura, no a las caderas.
Collares largos.
Vestite de un solo color de pies a cabeza, combina texturas.

NO: pantalones capri o 3/4.
Gargantillas.
Ropa muy suelta.

MUY ALTA

SÍ: blusas claras con pantalones oscuros o al revés, la idea es que marqués diferencia entre una parte de tu cuerpo y otra.
Acortá piernas usando jeans con dobladillos hacia afuera.
Zapatos de tacón bajo y tacón medio durante el día. Tacones altos, muy altos, solo para ocasiones especiales.
Los cinturones anchos y delgados.
Usá accesorios proporcionales a tu cuerpo. Es decir, grandes, pero uno a la vez.
Dale volumen a tu parte superior.
Faldas a la altura de la rodilla.