COXINHAS DE POLLO
¿Ahora que vemos la bandera de Brasil por todo lado, por qué no aprender un plato delicioso de ese país? Mi amiga Gaby Garbanzo, que todo lo sabe, me envió esta receta que te va a encantar. ¡Manos a la obra!
INGREDIENTES
(Para una docena de coxinhas)
Para la masa
3/4 de taza de caldo de pollo o la misma cantidad de agua con un cubo de concentrado
3/4 de taza de leche
1/2 barra de mantequilla
1 huevo batido
2 1/2 tazas de harina
Para el relleno
2 cucharadas de cebolla picada finamente
2 cucharadas de chile dulce picado finamente
2 dientes de ajo picados finamente
4 tazas de pollo cocinado o asado
1/2 taza de queso mozzarella rallado
Aceite de oliva
Sal y pimienta al gusto
Huevo batido y pan rallado para empanizar
Para preparar la masa
Poné a calentar el caldo, la leche y la mantequilla hasta que esté a punto de hervir. Añadí la harina de una sola vez y remové con una cuchara de palo. Agregá el huevo y mové muy bien hasta que esté todo perfectamente integrado. La masa se irá endureciendo hasta llegar a una consistencia óptima para su moldeado, algo parecido a la plastilina.
Colocá en una fuente y dejá reposar a temperatura ambiente.
Para el relleno
Sofreí los olores en un chorrito de aceite de oliva e incorporá el pollo desmenuzado. Salpimentá. Si deseás, podés incorporar chile picante al gusto. Retirá del fuego y mezclá con el queso rallado.
Para armar las Coxinhas
Con las manos enharinadas, tomá porciones de masa del tamaño aproximado de un huevo. Dale forma redonda y luego hacé un hueco en el centro, como formando una especie de cesta. Justo ahí colocá una cucharada del relleno. Apretá los bordes estirándolos hacia arriba de manera que todo el pollo quede cubierto y dale forma de muslo de pollo.
Una vez formadas las Coxinhas, pasalas por huevo batido y pan rallado, y freí en abundante aceite hasta que estén doradas.
Tips
Esta masa es extraordinariamente moldeable y fácil de manejar siempre que tengás las manos algo enharinadas.
Se pueden congelar después de empanar y cuando querás utilizarlas, bastará con que las dejés descongelar un rato para luego freírlas.