Loca-aventuras de mamá primeriza
Ser mamá primeriza es hermoso, experimentamos en nuestro propio cuerpo el milagro de la vida. Pero sin duda alguna, es también uno de los momentos más locos de nuestra existencia.
¡ES UN GRAN SUSTO!
Nos dan el bebé y descubrimos que hasta una batidora de mano trae instrucciones pero el bebé no. Y empiezan las loca-aventuras de mamá primeriza.
-¿Cómo se baña un bebé? Ese es EL DESAFIO. A un recién nacido uno lo trata como si fuera un zapatito de azúcar a punto de quebrarse, ¿cómo bañarlo? Afortunadamente siempre hay alguna veterana cerca que lo agarra con una seguridad que nos deja pasmadas. Luego de ver que no se quiebran, podemos darle el segundo baño y todos los que vienen luego.
-¿Cómo se cambia un pañal? Pareciera fácil pero tiene su ciencia, luego se hace tanto que hasta con los ojos cerrados, pero ese primer pañal requiere de la asesoría de una mamá experimentada.
-¿Cómo se saca el cólico? Oh sí, ese me costó aprenderlo. Lo hice en la primer noche de mi hija en casa, mis vecinos fueron los maestros. Cuando uno logra sacar el primer cólico, se siente mamá graduada.
-¿Cómo se amamanta? A pesar de que hay muchas guías de lactancia e información por todo lado, cuando llega el momento uno no tiene idea. Para empeorar el asunto, la leche no baja inmediatamente y muchas veces en el proceso experimentamos dolor. Afortunadamente las voces de apoyo siempre se hacen llegar y el mal rato pasa pronto, para darle espacio a todos los beneficios de la lactancia.
-¿Y si se enferma? Entonces, en el día 3 de nacido, el bebé estornuda y uno se asusta como si le fuera a dar pulmonía. El terror se apodera de mamá primeriza y empiezan las llamadas al pediatra. Por lo general no es nada de qué preocuparse.
-¿Estará respirando? Mamá primeriza no pega el ojo por meses, mientras el bebé duerme, la mamá vigila la cuna con todo el pánico de las historias de la muerte súbita. ¡Qué pánico de verdad! Nunca, pero nunca acuesten al bebé boca abajo.
-La identificación del llanto. El bebito llora por varios motivos y en muchos momentos del día. Puede ser por hambre, por que ensució el pañal o está a punto de hacerlo, por que tiene sueño, tiene frío, calor o extraña el vientre materno. Con el tiempo uno aprende a identificar el tipo de necesidad según el llanto. Pero en un inicio toca revisar pañal, tapar y destapar, mecer, pasear, cantar, bailar, destaparse la teresa ¡todo! en 60 segundos para tratar de que se calme.
-La terrible llegada de los sólidos. Los primeros meses es muy fácil en materia de alimentación. Si dimos lactancia, andamos con el refri pegado al pecho, pero cuando ya comienzan a comer, ese primer bocado nos quita 5 años de vida. Ver si el bebé traga correctamente sus primeros bocados, requiere la misma o más atención que el despegue de un cohete.
-El bebé ya se da vuelta. Un día descubrimos que nuestro bebé aprendió a darse vuelta. Solemos darnos cuenta por el llanto que acompaña la caída de la cama. Ese susto no tiene precio.
-Viene el primer diente: El primer diente es inolvidable. Un babeo jamás visto, una incomodidad y llanto que no nos explicamos. Las madrugadas son especiales para experimentar toda la incomodidad que un diente genera. Hasta que….¡aparece el piquito del diente y lo entendemos todo! Los demás dientes nos agarran ya más preparadas.
-Tiene dos días sin hacer popó: Nos pasamos el día cambiando pañales ¡hasta 10 al día! Nos hacemos expertas en el arte de sacarnos la teta y limpiar traseros, pero un día no hizo caca y al siguiente tampoco y ¡APARECE EL PANICO DE NUEVO! ese pánico es peor de lo que imaginamos, porque la solución suele ser un supositorio. ¡Cosa más terrible!
-La primer ida a la playa: Y se aventura uno a ir a la playa: ¡que cuidado se le brota con el calor! ¡que los zancudos! ¡que el chunchero que hay que llevar! Pero no hay nada como esa primer foto de los piecitos en la arena.
La mamá primeriza necesita el apoyo de las mamás expertas, suelen ser sus amigas, sus vecinas, sus primas y hermanas. Mi mamá se asustaba más que yo con el cuidado de mi recién nacida ¡hace mucho había pasado por esto!
No duden en preguntar todo, el pediatra y las mamás expertas son felices desplegando todo su conocimiento con las mamás primerizas y compartiendo con ellas la hermosa tarea de criar a nuestros hijos y crecer como madre y mujer.
Las loca-aventuras de la mamá primeriza son de infarto, pero son las que nos hacen convertirnos en la mamá experta que luego ayudará a las otras.
Les voy a dejar este link que es increíble para ayudarnos desde el embarazo hasta los 5 años de nuestro hermoso bebé.
