Recuperar al niño interno ¡qué pereza con los adultos!

Recuperar al niño interno ¡qué pereza con los adultos!

Somos adultos ¡qué aburrido! Hemos perdido muchas de las cualidades que nos hacían adorables para el mundo y que llenaban nuestros días de fantasía.

Yo recuerdo verme con un vestido saltando en la cama, imaginando que flotaba por un cielo lleno de arcoíris. Ahora lo que veo es una cama a la que le tengo que cambiar las sábanas.

 

Hay actitudes que no deberíamos perder como:

-La capacidad de asombro: Se han dado cuenta qué lindo es verle la cara a un niño cuando abre un regalo, cuando se encuentra con sus mejores amigos, cuando va a ver su película favorita o escucha en la radio su canción del momento.

-El amor incondicional: Los niños aman sin medida a su familia, a sus amigos y mascotas. No entienden de rencores infinitos.

-La energía: Muchas veces uno se pregunta ¿dónde se apagará éste niño? Ellos disfrutan 100 % su día y muchas veces se van a acostar ya regañados ¡odian dormir se les hace un desperdicio de vida!

-Sueñan en grande: Para los niños nada es inalcanzable, ellos sueñan en grande todos los días.

-Sociables: Algunos niños tardan unos minutos antes de entregarse por completo al juego con los desconocidos. Otros simplemente lo hacen desde el minuto 1. ¿Niños desconocidos? No, ellos solo ven a los otros como almas aventureras en busca de tanta diversión como ellos.

-Descomplicados: Los niños quieren: Comer rápido y simple, dormir poco o nada, jugar siempre. No es ninguna fórmula inexplicable.

-Quieren aprender: Los niños siempre quieren saber más, investigar más, que les contemos todo. Esa apertura al conocimiento debería ser eterna.

-Todo es divertido: Desde un juguete caro hasta una caja o una botella vacía. Para ellos todos los chunches tienen un potencial de diversión.

-Les sobra imaginación: Uno ve una iglesia, ellos un castillo encantado. Uno ve un zacatal, ellos un bosque mágico. Uno ve un puño de ropa para doblar, ellos un colchón donde brincar.

-Sinceridad total: No temen decir la verdad, si quieren más lo piden. Si no les gusta algo, lo dicen. Si están hartos lo gritan. Si aman, también lo gritan. Y nosotros tantas veces callados y enojados con el mundo.

Ese niño habita en nosotros, de vez en cuando se asoma, procuremos darle más espacio, invitarlo a salir para que nos recuerde la ilusión con la que veíamos el mundo. Y aleje a ese adulto que se queja todo el día, que se cansa con cualquier cosa, que se niega a seguir aprendiendo, que no tiene imaginación ni para escribir un mensajito y que guarda rencores desde 1990.

¡Hay que soltarse, reír hasta las lágrimas, abrazar a los amigos, besar a nuestros padres, bailar con nuestros hijos, sentir ilusión por la vida!

 


¡Huggies-100 momentos mágicos te podría llevar a París!
¡Huggies-100 momentos mágicos te podría llevar a París!

Banquete es más que salsa
Banquete es más que salsa

0 pena #SoyUnNuevoCiclo
0 pena #SoyUnNuevoCiclo

¡¡Estamos estrenando masabrazos.cr!!
¡¡Estamos estrenando masabrazos.cr!!