Lo que la maternidad me ha enseñado
Tengo 10 años en el mundo de la maternidad y cada día aprendo algo más.
Al día de hoy puedo decir que he aprendido qué:
-Cada mujer educa a su hij@ de una manera distinta y que no tiene nada de malo, siempre y cuando el fin sea el mismo. ¡Llevar para arriba personas amadas!
-No todas nacimos para ser madres. Algunas mejor los hubieran dado en adopción antes de hacerle daño a personitas indefensas.
-Los niños nos enseñan. Claro que nos enseñan, porque con sus ojos frescos nos hacen ver las cosas de un modo distinto, muchas veces sin todos los prejuicios que a lo largo de la vida fuimos adoptando.
-Nada es como lo pensamos. En el camino de la maternidad vamos a encontrar obstáculos y premios, valles y montañas y lo único que siempre nos va a guiar a hacer lo mejor, es el amor.
-Cada niño es distinto. No importa que sean los mismos padres, y la misma educación, cada niño es distinto y nunca debemos compararlos.
-El amor todo lo puede. ¿O no has visto lo fuerte que podés ser cuando de tus hijos se trata?
-Siempre da miedo. Sí, desde el momento en el que tenemos un hijo, le tememos más a todo, porque no queremos que ni la lluvia los moje, pero por lo mismo debemos educarlos de manera tal que puedan enfrentar la sociedad en la que vivimos.
-Nunca vamos a ser perfectas. La mamá perfecta no existe, no hay que empeñarse en serlo. Lo que sí debemos esforzarnos en ser, es aquella que escucha, que aprende, que guía con amor.
-Por algo somos madres. De pronto la maternidad nos agarró de sorpresa o no, pero por algo somos responsables de ese pequeño que confía en nosotros más que nada en su vida.
-No hay que desperdiciar ni un día. Los niños crecen rápido y cuando nos damos cuenta, estamos añorando la época en la que decían sus primeras palabras. Disfrutemos todas y cada una de sus etapas, todo se pasa muy pronto.
-Una madre, siempre debería entender a otra madre ¡Y AYUDARLA!