¿Por qué nos cuesta aceptar el cuerpo que tenemos?
La sociedad se ha encargado de hacernos ver que para ser aceptados por todos debemos tener un cuerpo saludable, tonificado, delgado y que llame la atención de todos.
Las pasarelas, los anuncios de televisión y hasta los mismos programas que vemos a diario, nos han metido en la cabeza que las personas con sobre peso no son bien vistas, y por eso me di a la tarea de hablar con mi amiga la psicóloga Jimena Caballero para que nos diera consejos de cómo podemos aceptarnos nosotros mismos sin importar lo que digan los demás.
“No se puede generalizar con que todas las personas no aceptan su cuerpo. Al contrario hay personas que viven enamoradas de su apariencia, mientras que hay otras personas que hacen balance. En el caso de las personas que tienen mucha inseguridad, esto ya viene desde la infancia y con los procesos que les enseñaron a tratar de sentirse bonitos. Sin embargo acá los medios de comunicación tienen mucha influencia en la percepción de la belleza”, dijo Caballero.
De fijo les ha pasado que cuando están pasados de peso les dicen “que gorda estás”, y si estamos delgadas “vea que fea se ve, se le notan todos los huesos”, nunca le vamos a quedar bien a nadie, y nunca nos hemos puesto a pensar por las luchas que está pasando la persona para sentirse bien.
“Una persona que tiene mayor seguridad sobre sí misma y que no se basa en su apariencia física, es muy probable que sea feliz, mientras que la persona insegura no ha pensado bien en el valor y la importancia que tiene, sobre un cuerpo perfecto”, agregó.
Según la psicóloga, lo que vemos en el espejo cada vez que nos ponemos de frente a él, será un reflejo simbólico de algo que emocionalmente creemos sobre nuestras cualidades y la identidad más que la apariencia.
“Si constantemente una persona que se ve al espejo enfoca su energía en lo que no le gusta ver, en lugar de proyectar lo que si le gusta, es lógico que su autoestima será baja. Todos debemos aceptar lo que tenemos, y en el caso de que podamos cambiar eso que no nos gusta, lo hacemos dándole un giro a nuestra vida para bien. Dietas, ejercicios, vida saludable, todo está en la mente y en el querer amarnos”, dijo la psicóloga.
En muchas ocasiones nuestros padres son los encargados de pasarnos los traumas de ellos mismos, por ejemplo: cuando una madre no logra bajar el peso que aumentó en el embarazo, por lo general sus hijos tendrán sobrepeso. Ya que según los estudios ella seguirá el mismo patrón para que todos sean iguales.
“En esos casos habrá una herencia de sentirnos mal con nuestra apariencia que no es nuestra. Viene de generación tras generación, cuando todos tienen sobre peso y uno de los miembros es delgado, esa personas será la del problema por ser diferente a todos. Es acá donde llegan las etiquetas y estereotipos de las personas. Todos los cuerpos son distintos y maravillosos”, expresó la especialista.
Para llegar a aceptarnos debemos identificar si lo que tenemos es un trastorno de alimentación como bulimia, anorexia, o es que no estamos felices con lo que vemos en el espejo.
Lo segundo es buscar ayuda con los especialistas para tratar nuestro problemas, y por último vernos en el espejo desnudos y para darnos cuenta de las cosas que podemos cambiar, ver lo bonito que tenemos, pero sobre todo, ver lo que valemos por dentro.
Nuestro cuerpo es mucho más que un estuche que debemos mantener bonito, es mucho más que eso.
No te preocupés por cómo te ves, preocúpate por lo que valés, así como eres estás perfecta.
